«El amor es una catástrofe espléndida: saber que te vas a estrellar contra una pared, y acelerar a pesar de todo: correr en pos de tu propio desastre con una sonrisa en los labios; esperar con curiosidad el momento en que todo se va a ir al carajo. El amor es la única decepción programada, la única desgracia previsible que deseamos repetir».
Terminé el libro anoche a las 0:55 horas. Era el mejor momento para hacerlo.
Me ha encantado. Es ágil, mordaz y muy absurdo. Beigbeder ha logrado su propósito «escribir una novela de amor con frases muy simples, es decir, lo que resulta más difícil».
A mi yo más Grinch no le ha gustado el giro final, me parece una concesión a todos los que le han llamado majadero mientras decía verdades como puños en las páginas anteriores.
Lo recomiendo. Se lee muy fácil y es corto.
Leer es vivir dos veces 