«Uno no decide lo que siente; siente lo que puede, el corazón tira de lo que tiene almacenado, y el mío todavía está repleto de ti. Me sirves de ayuda. Tú no, la idea de ti».
Efectivamente, como con buen criterio afirmaba @nuriapy lo que distingue al libro es el estilo de Beigbeder. Muy particular. A veces ingenioso y otras algo cargante. Me ha encantado. Me gustan las historias de «amor cortés» y me envuelven loco (también literalmente) las chicas como Oona. Muy a mi pesar, porque yo soy muy Salinger en esto.
Es una «novela de facción» recomendable, entretenida, sensible, con ciertos toques de coolturetismo bien gestionado. Se lee bien y te hace pasar ratos agradables.